30 de enero de 2012

Relatos de Internado: Medicina Interna

De antemano una disculpa por tener tan abandonado el blog pero como se imaginarán he estado bien ocupado con el internado, apenas me estoy acostumbrando a las guardias y cuando tengo libre aprovecho para dormir :P

Me tocó iniciar el internado en el servicio de Medicina Interna (Voy a pasar por 5 servicios: MI, Gineco, Pediatria, Cirugia y Urgencias) y como les había comentado me tocó iniciar el primer de enero :/  Ese día solo había un residente y yo, al ser domingo solo van los que tienen guardia, por lo que mi primer dia me tocó aprender solo. Entre las obligaciones del interno está elaborar el censo de los pacientes, las historias clínicas de los ingresos de ese día, elaborar los egresos, llenar solicitudes para los laboratorios, rayos x, banco de sangre y cualquier otra papelería. Colocar sondas, realizar gasometrías (con una jeringa tomamos sangre arterial para analizarla) curaciones y otros procedimientos menores. Se resume en que cualquier cosa que el residente no quiera hacer es obligación del interno J

El servicio de Medicina Interna es pesado porque hay mucho trabajo, existen 32 camas censables y por lo general siempre estamos llenos. En un día de guardia normal todo transcurre mas o menos así: 
  1. Me presento poco antes de las 7 am, me encuentro al interno que está de postguardia que ya se ve como zombie, le pido un censo y veo que pacientes nuevos ingresaron y cuales se fueron.
  2. A partir de las 7 es la entrega de guardia, en el cuarto médico el residente que estuvo de guardia entrega a los demás los pormenores de ese día, paciente x paciente se comenta su evolución, sus resultados de laboratorio y los pendientes que queda. Se hace incapie en los que ingresaron ese día, para que asi todos los conozcamos.
  3. Bajamos a desayunar y a las 9 am esperamos que llegue el jefe de servicio para comenzar la visita, esto es ir de cama en cama presentando a todos los pacientes, comentando su evolución, los pendientes y haciendo cambios en su tratamiento según lo indiquen.
  4. Al terminar la visita iniciamos a hacer los pendientes, por lo general lo prioritario es hacer altas para que los pacientes se puedan ir, y realizar los procedimientos que nos encarguen.
  5. A partir de las 3 pm los residentes e internos que no están de guardia comienzan a irse, por lo que ya solo estoy yo y el residente de guardia. Continuo con los pendientes y si hay ingresos comienzo a interrogarlos para hacer su historia clínica.
  6. Al llegar la noche dependiendo de la carga de trabajo sabes si vas a dormir o no :P, si hay muchos ingresos es probable que no, o si como suelen hacer llegan los pacientes en la madrugada también eso significa dormir poco o nada, si me apuro con los pendientes y son pocos ingresos por lo general significa que puedo dormir un par de horas, lo cual es ya es mucho y cuando pasa se agradece :D
  7. Al otro día ya inicia la posguardia, ya no me toca hacer los ingresos pero todavía tengo que estar en el servicio hasta la tarde, ayudando con los pendientes. Para estos momentos ya estoy en modo zombie y solo espero salir pronto.
  8. Si todo sale bien a las 4 pm ya estoy libre, por lo que corro a ver a mi novia quien se queja de que cuando estoy de posguardia solo me duermo ¡que me tenga consideración!

Y así es básicamente un día de guardia durante el internado, ya llevo un mes en el servicio y me he acostumbrado mejor, me gusta aunque hay días que se me hacen muy pesados otros pueden ser más tranquilos y productivos, el servicio es muy bueno y todos los residentes son buena onda (aunque luego como encargan cosas :P) Todavía me queda un mes y medio en Medicina Interna y espero poder seguirles contando mis experiencias  como MIP J

24 de enero de 2012

Internado, libros y así

Como habrán notado, el autor de este blog tiene There There lleno de telarañas. Así que seguiré posteando aquí cada martes, como al principio :) Cuando Carlos no esté en guardia, durmiendo o en modo zombie, que nos cuente sus chocoaventuras en el internado.

Y es que para darles un adelanto, cuando está de posguardia, vemos televisión:

- Y hoy fui al centro y cua, cua, cua - parloteo.
- Si amor. Tienes razón, amor. Que mal, amor - me contesta, cuando su subconsciente cree que es necesario.

Vemos la Ley y el Orden UVE. Mejor dicho, veo porque sé que en el momento en que dejo de hablar se queda dormido.

- Ya vimos este capítulo - le digo.

Me contesta con un ronquido. Le cambio al maratón de Malcom. Escena graciosa y el abre los ojos y se empieza a reír como desquiciado. Luego, se vuelve a dormir ¿? :P Se repite un par de veces.

Mi pregunta es ¿de verdad cree que yo creo que no está dormido? :P Mejor me llevo una revista o un libro. Mi novio es un zombie :P

Y hablando de revistas y libros, pretendo empezar a leer las Crónicas Vampíricas de Anne Rice en estas dos semanas que me quedan de vacaciones. Vampiros de verdad, no que brillan como Tinkerbell. 

¿No les pasa que a veces se clavan tanto con un libro, que sencillamente no pueden parar? A mi incluso me disgusta tener que dejarlo para comer o bañarme. Me puede amanecer leyendo. Así me pasaba en la secundaria y mi mamá iba a apagarme la luz cuando eran días de clases :P

Ah, pero que difícil es leer algo que no te gusta. Te da sueño, lees el mismo párrafo tres veces y lo único que recuerdas es la palabra final. Yo por eso cuento las hojas que faltan y según yo eso me motiva.

Y hablando de hojas de libros :P ¿están hartos de tener que cambiar de hoja? Yo no, pero este vato puso hasta a su hámster a chambear en este circuito para cambiar la hoja de su periódico.


Y hablando de hámsters... Bueno, ya :P ¿Y para cambiar la siguiente hoja? ¿Vuelvo a armar el circuito? :P

Hasta la próxima semana :3